y su clima es también tropical.
FLORA Y FAUNA.
COMIDA TIPICA.
En Chiapas hay diversidad de platillos autóctonos por mencionar algunos como son: Frijol escumite con chilpiín, frijoles ****** con carne salada de res, tanate y chumul,caldo de shuti, chanfaina estilo Soconusco, estofado de pollo, tamales de iguana, armadillo guisado, tamal de jacuané, nacapitu, cuchunuc, putzatzé, yumimujú, picte de elote, toro pinto y caldo de sihuamonte, mole de guajolote o el palmito de coroso, chaya, chipilín y hierba mora,caldo de chipilín, carne asada y longaniza, frijoles en sus diversas modalidades, y no podían faltar los tamales de chipilín, de elote, de bola, de carne con verdura,el casquito, la tortuga con pollo,tortuga en mole, pescado y mariscos.
También se preparan exquisitas bebidas como el agua de Chicha y el pozol reventado, pozol ***** y blanco, cacao, pinol y taberna, agua de naranja, tamarindo, papaya, tascalate, atol agrio, pinole, o, si lo prefiere, puede deleitarse con un rico chocolate.
TRADICIONES Y COSTUMBRES.
Pocos lugares reúnen tanta cultura y tradición en un espacio relativamente pequeño como Chiapas. Aquí te presentamos las principales costumbres, fiestas y tradiciones culturales de este bello estado.
Una rica y complicada gama de costumbres, fiestas, tradiciones y creencias conviven de manera increíble en Chiapas, pues cada uno de los grupos étnicos que allí habitan posee hondas raíces y tradiciones cuyos orígenes, en algunos casos, se pierden en el tiempo y en los recónditos secretos de la historia de sus más antiguos ancestros: los mayas de la época Clásica.
Así, en el amplio territorio que hoy ocupa el estado de Chiapas, se encuentran los grupos tzeltal, tzotzil, chol, zoque, tojolabal, lacandones y mames.
De los lacandones se sabe que su número es muy reducido y que se encuentran muy aislados en la zona de Montes Azules.
Los mames, por su parte, han casi desaparecido, pues su lengua y costumbres se encuentran casi relegados por completo.
No obstante, todos estos grupos comparten un número importante de rasgos culturales similares como la lengua, la vestimenta y principalmente las creencias, como los pensamientos acerca de la vida y de la muerte, la naturaleza, la religión entre católica y pagana, los grupos familiares, los niños, las mujeres y los ancianos, entre otras de las cosas que conforman su amplio mundo de símbolos e imágenes míticas y mágicas.
Uno de los lugares en donde mejor se palpa este mágico sentido, es tal vez el día de mercado en San Cristóbal de las Casas, pues allí se dan cita personajes de distintas comunidades entre el bullicio y la algarabía de cientos de vendedores de frutas, legumbres, animales, telas, artesanías y un sinfín de objetos útiles para todas las cosas de la vida diaria, en un marco en el que resaltan los coloridos trajes de distintas áreas de la entidad.
Sin duda otra importante muestra la podrá vivir en los poblados de San Juan Chamula y de Zinacantán, donde las celebraciones religiosas, al interior de los templos católicos, alcanzan niveles mágicos, pues las luces y el humo de las velas se mezclan con las oraciones en varias lenguas indígenas y el olor a aguardiente, en medio de un ambiente de gran misticismo.
Una recomendación que te podemos hacer es que conozcas y vivas la experiencia con la voz de los indígenas chiapanecos, quienes han dado vida a Centros Ecoturísticos donde ellos mismos te llevan a sus lugares místicos, comes con ellos, te muestran su gatronomía, su artesanía y comparten sus leyendas y cosmogonía. Te dejamos este especial para que decidas recorrer alguno de ellos y de paso, ayudarlos en su labor sustentable.
INDEPENDENCIA Y FEDERACIÓN.
Tras la independencia de Centroamérica las provincias que lo conformaban deciden unirse al
Primer Imperio Mexicano, pero después de la abdicación del emperador
Agustín de Iturbide el desconocimiento de los Tratados de Córdoba y el Plan de Iguala, y la proclamación de la Republica mexicana, los centroamericanos en uso de su soberanía optaron por separarse y formar la República de Centroamérica. Únicamente Chiapas, que anteriormente había estado ligada administrativamente a Guatemala, permaneció sin decidir su destino.
No teniendo el deseo de constituir un tercer país independiente, los chiapanecos eligieron libremente federarse a uno de los dos que los reclamaba con ansia.
El 4 de junio de 1823 se instala la junta general de gobierno después de años de lucha y de difíciles condiciones del país; en esta junta asisten 10 de los 12 partidos en que estaba dividida la provincia: Ciudad Real, Tuxtla, Llanos, Simojovel, San Andrés, Huistán, Palenque, Ocosingo, Tonalá, Ixtacomitán y Tapachula. Se acordó darle el nombre de Junta Provisional Gubernativa o Congreso Chiapaneco, sin ser reconocido por el gobierno mexicano, por lo que el 31 de julio de ese año se decretó la separación de Chiapas.
Los mexicanos cometieron muchos errores, el más grave fue la disolución de la Junta Suprema Provisional por parte del general mexicano Vicente Filisola, acción que hizo titubear el deseo de muchos chiapanecos de unirse a México.
Este como, entre otros, el del oficial Francisco Miranda y sus tropas cometía toda clase de tropelías en contra de la población de Tuxtla, exasperó a la población. Es entonces cuando en la Ciudad de Comitán, el 2 de octubre de 1823 nuevamente y con todo el valor civil se formula el Plan de Chiapas Libre.
En este se declaraba entre otras cosas, la independencia formal de la Republica Mexicana, La
Republica de la Provincias del Centro de América y de cualquier otra nación; la reinstauración de la Junta Suprema Chiapaneca; amnistía general en materia de opiniones políticas.
En 1824 la Junta Suprema convoco a un plebiscito para decidir el camino que tomaría el pueblo chiapaneco; en este se decidiría si Chiapas se debería federar a México, a Centroamérica o su debía convertirse en una nación independiente. La propuesta fue aceptada por los gobiernos Centroamericano y Mexicano. Y finalmente el 12 de septiembre se firmó el acta de adhesión de Chiapas a la federación mexicana, el 14 en el salón de sesiones de la Soberana Junta se realizó la solemne declaración con la asistencia del cabildo secular y eclesiástico, empleados públicos, comunidades religiosas, clero secular y vecindario decente. La incorporación a México se hizo efectiva con respecto a los partidos de Ciudad Real y Tuxtla el 14 de septiembre de 1824, mientras que Soconusco quedó en una situación indefinida hasta 1842, año en que México lo anexó a pesar de las protestas de Guatemala. La disputa limítrofe se prolongó hasta 1882, cuando se definió la actual frontera mediante el Tratado Herrera-Mariscal.
LINGUISTICA.
El idioma predominante y oficial es el
idioma español, en la variante de
español centroamericano, con la particularidad de tener
voseo (consiste en el uso de "vos" en vez de "tú" como pronombre personal). Este fenómeno se da tanto en Chiapas como en
Centroamérica, donde el voseo es el uso normal. Sin embargo, en Chiapas habitan diversas etnias con sus lenguas propias, provenientes de dos grandes ramas lingüísticas, la
mayense y la
mije-soquenas.
La lengua de origen
mixezoqueano llamada
zoque está emparentada con las lenguas
mixe y
popoluca de
Oaxaca y
Veracruz, y es reconocida como heredera directa de la lengua que hablaban los pueblos que crearon el estilo artístico
olmeca, una de las primeras culturas del continente americano.